"Cuentan que en tiempos de antaño erró por lo ancho del orbe, en el cual se resollaban salvajes contingencias por doquier, un heraldo de órdago que emanaba un fastuoso ademán de donaire, imperecedero según quimeras de allende, en la búsqueda de un par de refulgentes luceros, verdemar como las más añejas florestas bañadas por los arroyos que yacen a lo lejos de ellas, en el piélago, donde en las prominentes cumbres bajo los nimbos y estratos se hallaban, acatados por la custodia del señor del cenit."
miércoles, 26 de febrero de 2014
De los belfos
Este es un experimento de escritura que he realizado a principios de mes. Tiene que ver con la entrada anterior.
martes, 4 de febrero de 2014
Convergencia
Cuentan los sabios que hace mucho tiempo había un hombre que tenía un especial don a su alrededor que lo guiaba. El hombre anduvo por casi todo el planeta buscando dos brillantes ojos. Dos ojos verdeazulados como los antiguos bosques que había a las orillas de los ríos transparentes que llegaban al mar. Muy lejos se encontraba el mar y el bosque no era el mismo ya. Quien tenía los dos ojos que el hombre buscaba estaba encerrada en una fortaleza en lo alto de una montaña. La montaña era tan grande y tan alta que en la cima había grandes nubes. Toda la montaña y la dueña de los ojos eran del gran rey. El rey no quería que nadie saliera de su fortaleza por miedo a los malos que había fuera. Todo lo intentaba proteger.
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